Arthur Hayes ha criticado las estrictas políticas monetarias y las reglas fiscales del Banco Central Europeo (BCE), afirmando que agravan los desafíos económicos de Francia. Argumenta que la administración de Macron lucha por equilibrar la opinión pública con las demandas del BCE. Hayes advierte que medidas como los controles de capital o la incautación de activos extranjeros podrían provocar el colapso del sistema bancario de la UE y obligar a los bancos centrales globales a imprimir dinero a gran escala. Cree que el sistema del euro ha fracasado fundamentalmente, haciendo que los activos europeos sean poco atractivos a largo plazo, y sugiere que los inversores consideren Bitcoin y otros activos tangibles como alternativas.