La reciente audiencia de bancarrota de FTX reveló una actualización significativa para los acreedores en jurisdicciones restringidas, como China. Contrariamente al plan de recuperación original, que proponía la confiscación inmediata de fondos, ahora se permitirá a los acreedores transferir sus reclamaciones a jurisdicciones no restringidas. Esta decisión ofrece una vía potencial para que los acreedores afectados, incluidos aquellos que han completado el KYC en China pero residen en lugares como Singapur, puedan hacer efectivas sus reclamaciones. Sin embargo, este proceso puede requerir actualizaciones adicionales de información y conllevar costos de tiempo adicionales.