FTX ha comenzado la distribución de 5 mil millones de dólares en stablecoins a los acreedores, marcando el primer pago importante desde su bancarrota hace tres años. La distribución, calculada con base en los precios de finales de 2022, ha generado preocupaciones sobre una posible volatilidad del mercado, ya que los beneficiarios podrían optar por reinvertir o liquidar sus activos. Los poseedores de Ethereum están entre quienes reciben retornos relativamente favorables, mientras que otros enfrentan resultados mixtos. Se anticipa que la segunda fase de reembolsos, facilitada por BitGo y Kraken, influirá en el mercado al entrar en el cuarto trimestre, tradicionalmente un período fuerte para las criptomonedas. Aunque los analistas sugieren que la entrada de liquidez podría impulsar los precios de Bitcoin y altcoins, existe el riesgo de una venta masiva debido a las diferencias de precio entre 2022 y el mercado actual.