La Reserva Federal ha anunciado que mantendrá las tasas de interés sin cambios, conservando su postura actual de política monetaria. Esta decisión se produce en medio de evaluaciones continuas de las condiciones económicas y las presiones inflacionarias. La medida del banco central está en línea con las expectativas del mercado, ya que continúa monitoreando de cerca los indicadores económicos para guiar futuros ajustes de política.