Pierre Gramegna, presidente del Mecanismo Europeo de Estabilidad, advirtió que las stablecoins podrían amenazar la estabilidad financiera global si carecen de garantías y regulación adecuadas. Hablando en Washington, Gramegna enfatizó la necesidad de que las stablecoins operen dentro de un marco que garantice la seguridad del consumidor y financiera, destacando los riesgos potenciales si se vuelven comunes sin las mismas garantías que las monedas de los bancos centrales. Gramegna también señaló la importancia de la participación de la UE en el espacio de las criptomonedas, señalando que el 99 % de las stablecoins están actualmente denominadas en dólares estadounidenses. Sugirió que Europa podría quedarse atrás si no introduce una stablecoin denominada en euros, al tiempo que expresó confianza en que el efectivo, las monedas digitales y las stablecoins pueden coexistir.