Las monedas digitales son cada vez más reconocidas como activos estratégicos en conflictos geopolíticos, según un artículo reciente en Study Times. La publicación destaca cómo la descentralización y las características del libro mayor distribuido de la tecnología blockchain mejoran la integridad y seguridad de los datos de las transacciones, haciendo que las monedas digitales sean vitales en la guerra moderna y en las estrategias financieras. Bitcoin, a pesar de no contar con el estatus de refugio seguro que tiene el oro, está ganando protagonismo como un "activo no soberano" debido a su naturaleza descentralizada. El artículo señala que los precios de las criptomonedas a menudo fluctúan con las tensiones geopolíticas, mostrando su sensibilidad y adaptabilidad en liquidez. En tiempos de guerra, las monedas digitales pueden fortalecer la resiliencia económica y proteger los fondos, desempeñando un papel crucial en el apoyo a las operaciones y medios de vida en zonas de conflicto.