Los inversores adinerados en criptomonedas están trasladándose cada vez más a jurisdicciones con ventajas fiscales como los Emiratos Árabes Unidos, El Salvador y Europa del Este para minimizar los impuestos sobre sus ganancias en activos digitales. Figuras destacadas como Lark Davis se han mudado de Nueva Zelanda a Dubái, además de adquirir la ciudadanía de Granada por 250,000 dólares. Rafael Cintron, CEO de Wealthy Expat con sede en Dubái, señala que más del 80% de sus clientes están involucrados en criptomonedas, y muchos buscan una residencia libre de impuestos antes de que sus fortunas crezcan. Los expertos sugieren reubicarse antes de obtener ganancias significativas para evitar altas obligaciones fiscales en sus países de origen.