El gasto de los consumidores ha experimentado una ligera disminución, mientras que el empleo general se mantiene estable. Sin embargo, la demanda de mano de obra está debilitándose, con algunas empresas optando por despidos debido a la demanda débil y al aumento de la inversión en inteligencia artificial. El empleo temporal y a tiempo parcial se está convirtiendo en una opción más favorecida. Los salarios están aumentando moderadamente en todas las regiones. Los precios continúan subiendo, impulsados por mayores costos de importación, un aumento en los gastos de servicios y los impactos de los aranceles.