China ha establecido objetivos ambiciosos para la integración de la inteligencia artificial (IA), apuntando a una tasa de penetración del 70 % para 2027 y del 90 % para 2030. Esta iniciativa forma parte de una estrategia más amplia para incorporar la IA en diversos sectores, incluyendo tecnología, industria, consumo, gobernanza y servicios públicos, mientras la nación avanza hacia una "economía inteligente y una sociedad inteligente". El plan nacional de desarrollo anticipa que para 2027, aproximadamente 980 millones de ciudadanos chinos utilizarán regularmente dispositivos o servicios de IA. Esta medida subraya el compromiso de China de convertirse en un líder mundial en tecnología e innovación en IA.