La cadena de bloques de Cardano experimentó una breve división el viernes por la mañana después de que una transacción malformada fuera validada por nodos más nuevos pero rechazada por los más antiguos. El incidente, descrito por Charles Hoskinson como un ataque deliberado por parte de un operador descontento de un pool de participación, llevó a la creación de dos cadenas separadas. Los desarrolladores abordaron rápidamente el problema con un hard fork e identificaron la cartera del atacante en menos de un día. La interrupción, que no resultó en ningún tiempo de inactividad, fue causada por una vulnerabilidad en una biblioteca de software que permitió que la transacción inválida fuera procesada. El atacante, identificado como Homer J., afirmó que la acción fue una prueba de la red y se disculpó por las consecuencias no intencionadas. A pesar de la división, la red de Cardano permaneció en línea durante todo el incidente.