Una mujer canadiense, Yan Li Xu, perdió 480,000 dólares en Ethereum tras ignorar cuatro advertencias de estafa por parte del intercambio de criptomonedas NDAX. La Corte Suprema de Columbia Británica dictaminó que NDAX no era responsable por la pérdida, ya que el intercambio había cumplido con su deber al alertar repetidamente a Xu sobre un posible fraude. A pesar de estas advertencias, incluida una llamada grabada del personal de NDAX, Xu transfirió Ethereum por un valor de 671,000 dólares canadienses a una billetera externa vinculada a un esquema de inversión de alto rendimiento. Un análisis posterior de la cadena de bloques confirmó que los fondos fueron enviados a una billetera fraudulenta.