En junio de 2010, Gavin Andresen lanzó el primer grifo de Bitcoin, distribuyendo 5 BTC a los usuarios que completaban un CAPTCHA. Esta iniciativa resultó en una entrega total de 19,700 BTC, que hoy tendría un valor de más de 2 mil millones de dólares. El grifo fue un momento crucial en la adopción temprana de Bitcoin, ayudando a distribuir la criptomoneda ampliamente y a aumentar su base de usuarios.