Las empresas de minería de Bitcoin están superando al propio Bitcoin a medida que adoptan cada vez más modelos híbridos que integran inteligencia artificial y computación de alto rendimiento. Estas firmas, tradicionalmente vinculadas a las fluctuaciones del precio de Bitcoin, han cambiado de estrategia para capitalizar los avances tecnológicos. Aunque inicialmente se beneficiaron del auge de la IA hace dos años, sus acciones luego disminuyeron debido a la reducción de las ganancias mineras y a la mayor competencia. El resurgimiento actual destaca su adaptabilidad y potencial de crecimiento más allá de las operaciones mineras tradicionales.