La tasa de hash de Bitcoin ha aumentado a un nivel sin precedentes de 1.2 billones, estableciendo un nuevo récord para la red. Este incremento se produce mientras la dificultad de minería ha disminuido en un 2.7%, lo que podría hacer que la operación para los mineros sea más rentable. El ajuste en la dificultad refleja cambios en la potencia computacional de la red, lo que puede influir en la eficiencia y rentabilidad de las operaciones de minería.