La Ordenanza sobre Stablecoins de Hong Kong establece que solo las instituciones autorizadas pueden vender stablecoins respaldadas por fiat a inversores minoristas. La regulación va más allá de las ventas directas, exigiendo que las entidades que promuevan activamente actividades de stablecoin al público también obtengan una licencia. Esto se aplica incluso si la entidad no está directamente involucrada en actividades de stablecoin reguladas, asegurando una supervisión integral de las promociones de stablecoin en la región.