Elon Musk ha expresado su desconfianza en OpenAI y su CEO, Sam Altman, planteando preocupaciones sobre el control de las tecnologías avanzadas de inteligencia artificial. Los comentarios de Musk, realizados el 3 de junio de 2025, han intensificado los debates sobre la gobernanza y la gestión ética de la inteligencia artificial. Este desarrollo subraya el escrutinio continuo del liderazgo en IA y la importancia de la confianza en la gestión de la tecnología.