A partir del 1 de enero de 2026, los usuarios de criptomonedas en el Reino Unido deberán proporcionar información personal a los proveedores de servicios, incluyendo su nombre completo, fecha de nacimiento, dirección, país de residencia y número de identificación fiscal. Esta regulación afecta a todas las entidades clasificadas como proveedores de servicios criptográficos, tales como intercambios, aplicaciones de billetera, mercados de NFT y servicios de gestión de activos criptográficos. El incumplimiento podría resultar en multas de hasta £300 (aproximadamente $408).